viernes, 7 de diciembre de 2012

Galletas esponjosas de calabaza



¿No os parecen preciosas las calabazas? Es curioso pero la calabaza se ha usado en el lenguaje popular como algo negativo: "le han dado calabazas", "eres más sosa que la calabaza"..., sin embargo yo me pongo contentísima cuando me regalan una calabaza, son tan bonitas... ese color tan cálido...



En casa nunca se ha comido mucha calabaza, para qué nos vamos a engañar. Siempre he visto la calabaza como icono asociado a Halloween, como un objeto decorativo... Sin embargo, redescubrí la calabaza en un plato que probé hace unos 3 años en casa de mis cuñados en Holanda. Era un plato precocinado de Albert Heijn (un supermercado que me tiene loca, pero eso sería muy largo de explicar) y llevaba trocitos de calabaza, queso azul y no sé qué más. Juro que lo he vuelto a buscar intentando descifrar el resto de ingredientes pero no lo he encontrado. La cuestión es que desde aquel día la calabaza tomó una nueva dimensión para mi y pasó de la estantería a la cocina.

Lo primero que hice con calabaza fueron estas curiosas galletas que relato hoy aquí.

Nunca me han gustado las galletas crujientes (de hecho compro las María, abro el paquete y espero a que queden blanditas). Pues bien,  éstas son unas galletas muy esponjosas, no tienen nada que ver con las galletas que conocía, parece un híbrido entre galleta y bizcochito. Y además, esto es importante: no llevan ni mantequilla ni aceite, sino puré de calabaza!! No hace falta decir que son más ligeritas, ¿verdad?

Pues a ver si os animáis a probarlas:


INGREDIENTES:

- 100 g de puré de calabaza
- 100 g de harina
- 75 g de azúcar
- 1 huevo
- 1 cucharadita de levadura
- 50 g de pepitas de chocolate
- 1 pizca de canela

ELABORACIÓN

  1. Se hace el puré de calabaza: cortamos la calabaza a trocitos y ponemos en un cazo con agua a fuego medio unos 20 minutos. Después trituramos con la batidora o picadora
  2. Precalentar horno a 180 grados
  3. Mezclamos el puré con la harina, el azúcar y el huevo.
  4. Añadimos la levadura, la canela y el chocolate
  5. Preparamos la bandeja del horno con papel de horno (valga la redundancia) y vamos echando cucharaditas dejando un buen espacio entre galleta y galleta, porque crecen.  Al ser una masa bastante líquida cuesta que no chorree... no pasa nada, luego se corta
  6. Horneamos 10 minutos o hasta ver que las galletas adquieren un tono dorado.
Esta vez hice el doble porque tenía el doble de puré, el resto lo tengo congelado y lo haré cuando me convenga...


Y ahora, para cerrar, quiero recordar una canción popular que cantaba mi adoradísima "abuelita" Altagracia:
"A mi me ha ido bien, te doy las gracias
te tengo preparadas las calabazas...
Esas calabacitas yo no las quiero
que me han dicho que tienes amores nuevos.... (sigue más, pero ya no hay más calabazas)

5 comentarios:

  1. Me apunto ésta receta! Por cierto, a mí también me encantan las calabazas. tanto de aspecto, como de sabor.
    beso.

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  2. Ohhh qué ricas Anabel, que bien me has dado idea para hacer receta con calabazas pero en dulce!
    Besos

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  3. Ohhh que ricas parecen, jeje esto intento hacerlo. Con la de recetas que hago usando la calabaza pero en galletas no se me habia ocurrido :)

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  4. vaya, que curiosas estas galletas de calabaza! seguro que están riquísimas, me gustaría un bocadito, puedo?

    besotes!

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