Así que ayer por la tarde pensé que el viernes por la mañana me iría con Jakob a presentar a Ninke a sus compañeros de oficina y para no ir con las manos vacías decidí hacer estos cupcakes de Oreo (u otra marca).
A parte de originales y fáciles de hacer, están muy ricos (al menos eso pienso yo, allá cada uno con sus preferencias, claro).
INGREDIENTES: --> OJO!! PARA 30 CUPCAKES
- 42 galletas Oreo: 30 para poner como base en los cupcakes y el resto troceados a mano o con un mortero
- 1 Kg de queso tipo Philadelphia: yo compré 2 tarrinas de 350 del normal y una de 200 de light (para que fuera menos "gordi"... pero es que salen 30.... son unos 33 gr por unidad)
- 1 taza de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla (si no tenéis podéis echar azúcar avainillada, o una vaina de vainilla)
- 4 huevos grandes a temperatura ambiente
- 1 taza de creme fraiche --> yo no encontré y lo sustituí con un yogur griego natural (menos "gordi" y vale perfectamente)
- 1 pellizco de sal
ELABORACIÓN:
- Precalentar el horno a 135º y preparar los moldes (moldes de papel dentro de los moldes metálicos o de silicona para que no se desparrame)
- Poner en cada molde una galleta de base (esto hará de base y será el toque "gracioso")
- Batir bien el queso hasta que quede suave (idealmente que no esté demasiado frio)
- Añadir poco a poco el azúcar y batir
- Añadir la vainilla y batir
- Ir añadiendo y batiendo los huevos de uno en uno
- Mezclar el yogur (o nata / creme fraiche) y la sal
- Repartir esta mezcla en los 30 moldes (no os preocupéis que la cantidad es bastante generosa)
- Hornear durante unos 22 minutos. En la receta dice que se vayan moviendo alguna vez las bandejas, pero yo lo que hice fue poner el horno en modo aire para que distribuyera mejor el calor.
- Sacar del horno y enfriar para después meter en la nevera (dejándolas en las bandejas) unas 4 horas o dejar durante toda la noche.
Que os aproveche!!
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